sábado, 28 de febrero de 2009

ASI ESTOY YO SIN TI

Extraño como un pato en el Manzanares,
torpe como un suicida sin vocación,
absurdo como un belga por soleares,
vacío como una isla sin Robinson,
oscuro como un túnel sin tren expreso,
negro como los ángeles de Machín,
febril como la carta de amor de un preso…,
Así estoy yo, así estoy yo, sin ti.


ADRIAN RAMIREZ. ARGENTINA
Es mi canción preferida porque además de ser genial, como el maestro, me parece que expresa con metáforas espectaculares cómo se siente uno cuando extraña a alguien...

ROBERTO RANGEL. 32 AÑOS. GERENTE DE SISTEMAS. MONTERREY. MEXICO.
Mi canción favorita? Es difícil decirlo puesto que todas me gustan ya que todas tienen algo… Podría decirte que “Y SIN EMBARGO”, sin embargo, eso sería lo más lógico así que, entre todas elegiré “ASÍ ESTOY YO SIN TI” del disco “HOTEL, DULCE HOTEL”. Una canción que Sabina mismo dice que no volvería a cantar pero que es una joya dentro de su discografía. El por qué me gusta, me fascina la forma de ejemplificar de Sabina las cosas, el repetirte mil veces pero de mil formas diferentes la idea que quiere expresar en sus canciones, aunque eso signifique que me trata como tonto, pero con poesía todo se vale. Además me encantan ese tipo de canciones que cuando alguien más las quiere cantar, requiere de ayuda de la libreta porque es prácticamente imposible sabérsela por completo.

viernes, 27 de febrero de 2009

AMOR SE LLAMA EL JUEGO

El agua apaga el fuego
y al ardor los años,
amor se llama el juego
en el que un par de ciegos
juegan a hacerse daño.
y cada vez peor
y cada vez más rotos
y cada vez más tu
y cada vez más yo
sin rastro de nosotros.

HERNAN BELEN. 29 AÑOS. ARGENTINA.
Por este tema lo empecé a escuchar a Joaquín, por eso es el que más me gusta. Lo escuché por primera vez a los quince años. Yo venía de un amor de los que se tienen a esa edad y justo me había peleado. Fui a la casa de mi hermano y mi cuñada estaba escuchando ese tema y cuando escuché la estrofa que dice "amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a hacerse daño", me mató y de ahí en adelante me dediqué a escucharlo. Si bien antes había escuchado otros temas, digamos que ese fue el que me hizo decidir comprar mi primer CD de Joaquín.

A LA ORILLA DE LA CHIMENEA

Y si quieres también
puedo ser tu abogado y tu juez,
tu miedo y tu fe
tu noche y tu día.
Tu rencor, tu por qué, tu agonía…
o tal vez esa sombra
que se tumba a tu lado en la alfombra
a la orilla de la chimenea
a esperar que suba la marea…

NOELIA DIACO. 24 AÑOS. ESTUDIANTE. BUENOS AIRES. ARGENTINA.
Una vez se la regalé a una ex pareja, alguien a quien quise mucho, porque siento que la canción habla de la entrega absoluta de una persona a la otra, y era lo que sentí hacer en ese momento.

DANIEL CORTEZ RAYAS. 24 AÑOS . PSICOLOGO. MEXICO.
Es una canción que me ha acompañado a lo largo de mi historia sentimental y siempre me he quedado con las ganas de dedicársela a alguien que termine correspondiéndome. Es como un ave de mal agüero. Siempre que comienzo a cantarla es casi una garantía que las cosas saldrán mal. Pero no dejo de sentir una suerte de alivio perverso al cantar, a voz en cuello, "toma mi dirección cuando te hartes de amores baratos".

ALEJANDRO CORDOBA. 27 AÑOS. ESTUDIANTE Y EMPLEADO. ROSARIO. ARGENTINA.
http://www.revolucioncompartida.blogspot.com/
"Puedo ponerme humilde y decir
que no soy el mejor, que me falta valor
para atarte a mi cama"
Varias veces le di mi voz y distintos oídos a esa frase. Por aquel tiempo, cuando cursaba la secundaria, sabía que las palabras de Sabina, de Silvio y otras tantas de Mario Benedetti servían para cambiar el tono de una conversación de dos.
Entonces tenía 16 (hoy 27) y me gustaba ver el efecto -experimentar el efecto- de hacerme poeta para tratar de enamorar aunque sea brevemente. Todavía no existía la palabra "chamuyo". A lo mejor todos éramos más inocentes y por eso cada vez que me decidía a hablar mirándoles fijamente a los ojos, yo nunca usaba esas palabras sin sentirlas con un alto grado de intensidad inevitable. Fueron varias interlocutoras las que pasaron por mis pruebas, muchas sólo rieron y no me creyeron demasiado... pero otras sí lo hicieron. Al ritmo de aquellas poesías y de esos sentimientos enormes pero siempre fugaces no sólo éramos jóvenes sino que también sentíamos que realmente girábamos el mundo. Y que siempre valía la pena hacerlo.

jueves, 26 de febrero de 2009

ALIVIO DE LUTO

CD

  1. Pájaros de Portugal
  2. Pie de guerra
  3. ¡Ay! Rocío
  4. Contrabando
  5. Paisanaje
  6. Resumiendo
  7. Máter España
  8. Con lo que eso duele
  9. Dos horas después
  10. Me pido primer
  11. Nube negra
  12. Números rojos
  13. Seis tequilas
    DVD
    Incluye una entrevista realizada por el periodista Javier Rioyo a Joaquín Sabina y a los productores del disco, además de versiones, acústicas y caseras, de algunas de las canciones del disco.

CANCION ELEGIDA:
RESUMIENDO
Resumiendo, que tengo un cajón de la firma Pandora,
treinta y siete chansons, c’est a dire, una y media por hora,
sin contar los sonetos, las coplas, los epistolarios,
los tinteros borrachos de tinta que ordeño a diario.
Nos tocaba crecer y crecimos, vaya si crecimos,
cada vez con más dudas, más viejos, más sabios, más primos,
pero todo se acaba, ya es hora de decirte ciao,
me ha citado la luna en Corrientes esquina Callao.
Resumiendo,
sabes dónde estoy,
resumiendo,
si me llamas voy,
resumiendo,
no me hagas hablar.
Resumiendo, esto no es un arreglo floral por tu santo,
solo sombras que en noches de insomnio me alfombran el canto,
sobre nuestras cabezas silbaban calumnias, payolas,
mano a mano las fuimos driblando a puertita gayola.
Hace siglos que quiero enviarte palomas de humo,
antes de que carcoma el invierno la culpa que asumo,
ten a bien recibir de mi parte un abrazo de amigo,
cuando estalle la guerra estaré en la trinchera contigo.
Resumiendo,
sin voto y sin voz,
resumiendo,
que se pasa el arroz,
resumiendo,
dos bises y amén.
Resumiendo que tengo un cajón de la firma Pandora…
Resumiendo,
que te tengo ley,
resumiendo,
y nos dieron las seis,
resumiendo,
sin exagerar.
Una noche te vimos con Tola bajar la escalera,
yo rompía una copa y Javier destrozaba la hoguera.
Resumiendo,
Que me grita el escenario ven,
resumiendo,
pido un empujón, no te das cuen,
resumiendo,
que vomito con la televisión,
resumiendo,
me hace falta un polvo un buen rock and roll,
resumiendo,
nos veremos cuando se ponga el sol…


COMENTARIO: Otra de las canciones en las que Joaquín hace una especie de “inventario” de algunas de las cosas que tiene y de algunos de los momentos vividos. Y otra vez vuelve a nombrar a este Buenos Aires querido, como si tuviera una mitad de su cuerpo a cada lado. En una sola canción, Sabina logra resumir más de un sentimiento. La mejor frase de este tema sin dudas: “Resumiendo, si me llamas voy”. Algo más claro que eso?

miércoles, 25 de febrero de 2009

DIARIO DE UN PEATON

CD 1

  1. No permita la virgen
  2. Vámonos pa´l sur
  3. La canción más hermosa del mundo
  4. Como un dolor de muelas
  5. 69 punto G
  6. Peces de ciudad
  7. El café de Nicanor
  8. Lágrimas de plástico azul
  9. Yo también se jugarme la boca
  10. Arenas movedizas
  11. Ya eyaculé
  12. Cuando me hablan del destino
  13. Camas vacías
  14. Semos diferentes (bonus track).
    CD 2
  15. Ratones coloraos (Sevillanas)
  16. A vuelta de correo
  17. Ay Calixto
  18. Canción de cuna de la noche
  19. Flores en la tumba de un vasquito
  20. La canción más hermosa del mundo
  21. Benditos malditos al pil pil
  22. Doble vida
  23. Me plantó la princesita azul
  24. Incluso en estos tiempos
  25. Un día si, cuarenta no
  26. Ratones coloraos (Rap Sevillanas)
  27. Video clip: 69 Punto G
  28. Video clip: Lágrimas de plástico azul

CANCION ELEGIDA:
LAGRIMAS DE PLASTICO AZUL
Por las aceras de la madrugada
baila con las porteras su milonga al sol,
con las ojeras que le sobran a tus ojos, corazón,
un día después de lo que el viento se llevó.
Las secretarias de las oficinas
desayunan en la esquina un tentempié
y cuando bajan de la luna al disco duro de roer,
con el sueño del revés y un futuro sin mañana, lloran
Lágrimas de plástico azul rodando por la escalera,
tribus de los mares del sur al oeste de la frontera,
labios de papel de fumar, sabios que no saben nada,
náufragos en la catedral, telarañas acostumbradas
a hacer noche en el cristal.
Los cirujanos de las decepciones
cercenan por lo sano la alegría,
las venas del amanecer almacenan sangre fría
y cada lunes nace muerto el nuevo día.
El lápiz comisura de tu boca
retoca los agravios del carmín,
los proxenetas se colocan con aseo el peluquín
y los Romeos se demoran y las Julietas se desenamoran.
Lágrimas de plástico azul rodando por la escalera,
tribus de los mares del sur al oeste de la frontera,
labios de papel de fumar, sabios que no saben nada,
náufragos en la catedral, telarañas amotinadas…
Lágrimas de plástico azul con sabor a despedida.
¿Cuándo cruzará el autobús este callejón sin salida?
Labios de papel de fumar, sabios que no saben nada,
pétalos de flor de hospital, telarañas amotinadas…

COMENTARIO:
La primera vez que escuché esta canción yo estaba en un bar de Palermo, había ido a ver un recital de Fena. Antes de empezar a cantar este tema, contó que había sido compuesto junto a Joaquín Sabina. Y fue escucharlo y enamorarme. Sentí que aunque Fena no hubiera aclarado la participación de Joaquín en esta letra, yo me hubiera dado cuenta de inmediato. Probablemente no hubiera sido así, pero me gusta pensarlo de esa manera. Una bellísima letra, que nos lleva a ver las lágrimas rodando por la escalera… porque todos los que alguna vez nos enamoramos de imposibles (o de posibles que hacen daño) esperamos con esperanza que pase el autobús que nos saque de aquel callejón que nos parece sin salida. Una canción urbana y gris, que nos encierra en oficinas sin alma, con secretarias sin corazón para las que el amor no es más que una utopía. Una forma de describir la triste realidad de la muerte absoluta del romanticismo, con Romeos que ya no esperan, con Julietas que no juran eternidades y con mujeres que terminan llorando algo tan artificial como esas lágrimas de plástico azul.

martes, 24 de febrero de 2009

DIMELO EN LA CALLE

  1. No permita la virgen
  2. Vámonos pa´l sur
  3. La canción más hermosa del mundo
  4. Como un dolor de muelas
  5. 69 punto G
  6. Peces de ciudad
  7. El café de Nicanor
  8. Lágrimas de plástico azul
  9. Yo también se jugarme la boca
  10. Arenas movedizas
  11. Ya eyaculé
  12. Cuando me hablan del destino
  13. Camas vacías
  14. Semos diferentes

CANCION ELEGIDA:
LA CANCION MAS HERMOSA DEL MUNDO
Yo tenía un botón sin ojal, un gusano de seda,
medio par de zapatos de clown y un alma en almoneda,
una hispano olivetti con caries, un tren con retraso,
un carné del Atleti, una cara de culo de vaso,
un colegio de pago, un compás, una mesa camilla,
una nuez, o bocado de Adán, menos una costilla,
una bici diabética, un cúmulo, un cirro, una strato,
un camello del rey Baltasar, una gata sin gato,
mi Annie Hall, mi Gioconda, mi Wendy, las damas primero,
mi Cantinflas, mi Bola de Nieve, mis tres Mosqueteros,
mi Tintín, mi yo-yo, mi azulete, mi siete de copas,
el zaguán donde te desnudé sin quitarte la ropa.
Mi escondite, mi clave de sol, mi reloj de pulsera,
una lámpara de Alí Babá dentro de una chistera,
no sabía que la primavera duraba un segundo,
yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.
Les presento a mi abuelo bastardo, a mi esposa soltera,
al padrino que me apadrinó en la legión extranjera,
a mi hermano gemelo, patrón de la merca ambulante,
a Simbad el marino que tuvo un sobrino cantante,
al putón de mi prima Carlota y su perro salchicha,
a mi chupa de cota de mallas contra la desdicha,
mariposas que cazan en sueños los niños con granos
cuando sueñan que abrazan a Venus de Milo sin manos.
Me libré de los tontos por ciento, del cuento del bisnes,
dando clases en una academia de cantos de cisne,
con Simón de Cirene hice un tour por el monte Calvario,
¿qué harías tú si Adelita se fuera con un comisario?
Frente al cabo de poca esperanza arrié mi bandera,
si me pierdo de vista esperadme en la lista de espera,
heredé una botella de ron de un clochard moribundo,
olvidé la lección a la vuelta de un coma profundo.
Nunca pude cantar de un tirón
la canción de las babas del mar, del relámpago en vena,
de las lágrimas para llorar cuando valga la pena,
de la página encinta en el vientre de un bloc trotamundos,
de la gota de tinta en el himno de los iracundos.
Yo quería escribir la canción más hermosa del mundo.


COMENTARIO: Los fanáticos de Joaquín estamos convencidos de que lo consiguió: tal vez, escribir la canción más hermosa del mundo, haya sido más fácil para Joaquín que lo que él mismo supone.

lunes, 23 de febrero de 2009

NOS SOBRAN LOS MOTIVOS

  1. Nos sobran los motivos
  2. Tan joven y tan viejo
  3. Una canción para la Magdalena
  4. Ruido
  5. De purísima y oro
  6. Calle Melancolía
  7. Rosa de Lima
  8. Que se llama Soledad
  9. 19 días y 500 noches
  10. Contigo
  11. Noches de boda / Y nos dieron las diez
    CD 2
  12. Yo me bajo en Atocha
  13. Princesa / Barbi Superestar
  14. ¿Quién me ha robado el mes de abril? / Así estoy yo sin ti
  15. Medias negras
  16. Pacto entre caballeros
  17. Donde habita el olvido
  18. Conductores suicidas
  19. La del pirata cojo
  20. Y sin embargo te quiero (intro Olga Román)
  21. Y sin embargo

CANCION ELEGIDA:
NOS SOBRAN LOS MOTIVOS
Esta sala de espera sin esperanza,
estas pilas de un timbre que se secó,
esta mala ventura, esta contradanza,
este tráiler de mudanzas,
con los muebles del amor.
Esta campana herida en el campanario,
esta mitad partida por la mitad,
estos besos de Judas, este calvario,
este look de presidiario,
esta cura de humildad.
Este cambio de acera de tus caderas,
este payaso que ya no hace reír,
este arrabal sin grillos en primavera,
ni espaldas con cremallera,
ni anillos de presumir.
Este dulce de leche contaminado,
este perro andaluz sin domesticar,
este orgullo de príncipe destronado,
esta esquina del pecado,
esta ruina de Don Juan.
No abuses de mi inspiración,
no acuses a mi corazón
tan maltrecho y ajado
que está cerrado por derribo.
Por las arrugas de mi voz
se filtra la desolación
de saber que estos son
los últimos versos que te escribo,
para decir “condios” a los dos
nos sobran los motivos.
Esta necesidad de necesitarte,
este llamarte sin quererte llamar,
este olvidarme del deber de olvidarte,
este lunes, este martes
y el miércoles que vendrá.
Esta lágrima de hombre de las cavernas,
esta horma del zapato de Barba Azul,
que poco rato dura la vida eterna
por el túnel de tus piernas
entre Córdoba y Maipú.
Esta guitarra huérfana y delirante,
con su terco knock knockin’ on heaven’s door,
estos dedos que dejan caer un guante,
delicado y trashumante,
a los pies de un trovador.
Este Land Rover aparcado en tu puerta,
la rueca de Penélope en el Luna Park,
este sueño que sueña que se despierta,
esta caracola muerta
sin la gramola del mar.
No abuses de mi inspiración,
no acuses a mi corazón
tan maltrecho y ajado
que está cerrado por derribo.
Por las arrugas de mi voz
se filtra la desolación
de saber que estos son
los últimos versos que te escribo,
para decir “condios” a los dos
nos sobran los motivos.


COMENTARIO: Si tuviera que escoger una sola de todas las canciones de Joaquín, sin dudas, elegiría esta. Mi canción preferida. Mi himno durante algunos años. Mi pesadilla. La que me hubiera encantado escribir. La que no quisiera volver a cantar. Es otra de los temas que le dedicó a Paula, su novia argentina. Hay una versión en vivo en la que Joaquín recita un poema, desgarrador, desde las entrañas, escrito con sangre más que con tinta.

Este adiós no maquilla un hasta luego
este nunca no esconde un ojalá
estas cenizas no juegan con fuego
este ciego no mira para atrás.
Este notario firma lo que escribo
esta letra no la protestaré
ahórrate el 'acuse' del recibo
estas vísperas son las de después.
A este ruido tan huérfano de padre
no voy a permitirle que taladre
un corazón podrido de latir.
Este pez ya no muere por tu boca
este loco se va con otra loca
estos ojos no lloran más por ti.

Esta canción es, sin dudas, la manera más dulce y encantadora de ponerle un punto final a una relación que necesitamos dejar atrás. Un adiós dicho con la más pura poesía a la que Joaquín nos tiene acostumbrados. Un caballero que renuncia a una dama, a la que se niega a seguir amando. Sin odios, sin rencores, destila solamente amor y melancolía. Creo que todos los que nos vimos obligados (porque nos sobran los motivos) a terminar una historia, podríamos elegir este modo elegante y romántico de decir adiós. Cada frase es un reflejo de la tremenda desolación en la que nos sumergimos cuando debemos concluir algo, más por obligación que por deseo. Para protegernos. Para salvarnos. Para colgarnos en el corazón el cartel de “Cerrado por derribo”... hasta la próxima vez que volvamos a enamorarnos como idiotas.

domingo, 22 de febrero de 2009

19 DIAS Y 500 NOCHES

  1. Ahora que…
  2. 19 días y 500 noches
  3. Barbi Superestar
  4. Una canción para la Magdalena
  5. Dieguitos y Mafaldas
  6. A mis cuarenta y diez
  7. El caso de la rubia platino
  8. Donde habita el olvido
  9. Nos sobran los motivos
  10. La Biblia y el calefón
  11. Pero qué hermosas eran
  12. De purísima y oro
  13. Como te digo una "co" te digo la "o"
  14. Noches de boda

CANCION ELEGIDA:
DIEGUITOS Y MAFALDAS
Veinte años cosidos a retazos
de urgencias, disimulos y rutinas,
veinte años cumplidos, en mis brazos,
con la carne del alma de gallina.
Veinte años de príncipes azules
que se marchaban antes de llegar,
veinte tangos de Manzi en los baúles,
veinte siglos sin cartas de papá.
De González Catán, en colectivo,
a la cancha de Boca, por Laguna,
va soñando -”Hoy ganamos el partido”-
la niña de los ojos de la luna.
Los muchachos de “la doce” más violentos,
cuando la “junan”, en la Bombonera,
le piden, a la Virgen de los Vientos,
que, le levante, a Paula, la pollera.
Veinte años de mitos mal curados
dibujando Dieguitos y Mafaldas,
veinte vidas hubiera yo tardado
en contar los lunares de su espalda.
Le debo una canción y algunos besos
que valen más que el oro del Perú,
sus huesos son sobrinos de mis huesos,
sus lágrimas los clavos de mi cruz.
De González Catán, en colectivo,
a la cancha de Boca, por Laguna,
va soñando -”Hoy ganamos el partido”-
la “jermu” que me engaña con la luna.
Alguna vez harán un monumento
los de la barra brava a mi “bostera”,
y, una ermita, a la Virgen de los Vientos,
que, le levanta, a Paula la pollera.
De González Catán a Tirso de Molina, qué trajín,
de España a la Argentina, qué meneo
qué vaivén, qué ajetreo
qué mareo, qué ruina
¿y por culpa de quién?
del amor de una mina,
¿y total para qué?
si, al final, se rajó con un pibe,
que le prohíbe a mi ex
ir a verme al Gran Rex,
cuando estoy de visita,
no sea que Paulita se ponga a llorar,
al oír su milonga,
no sea que a Paulita le dé por bailar,
al compás de la conga
y vuelva enfermita a González Catán
y no se reponga
y se ponga más loca de lo habitual,
bendita pollera,
menuda bandera para una canción
¡y que delantera!
aquel año Boca salió campeón,
de la Bombonera,
ninguna bostera se puede quejar
aunque le sobre razón, si
pinta remeras con el corazón
y con las caderas,
le toca a Palermo tocar el balón,
“la doce” se altera,
le toca al gallego tocar este son…
para una bostera
el año que Boca salió campeón,
en la Bombonera.

COMENTARIO: Preciosa canción de Joaquín, una de las pocas en las que sabemos que nos está contando una historia real. Dedicada a Paula, su novia argentina. Una chica mucho más joven que él con la que vivió una historia de amor lo bastante intensa como para dedicarle un par de canciones. Paula existe, aunque Joaquín muchas veces se niega a hablar de ella y otras tantas lamenta no haberla mencionado. Parece que Joaquín no puede vivir sin enamorarse de Buenos Aires y en Buenos Aires. Esta canción también es una de las preferidas por el público que escucha a Sabina, quizás porque es una ventana que nos abre para meternos en su intimidad, en su corazón y porque escuchándola también podemos contar los lunares de Paula. Con un rimo pegadizo, un estribillo intachable, es una buena forma de meternos en la intimidad de Joaquín y de paso, divertirnos un rato. Diego Maradona y Mafalda, dos referentes de nuestro país, dos íconos de Argentina, cobran vida en este hermoso poema hecho canción.

sábado, 21 de febrero de 2009

ENEMIGOS INTIMOS

  1. La vida moderna
  2. Lázaro
  3. Llueve sobre mojado
  4. Tengo una muñeca que regala besos
  5. Si volvieran los dragones
  6. Cecilia
  7. Delirium tremens
  8. Yo me bajo en Atocha
  9. Buenos Aires
  10. Más guapa que cualquiera
  11. Flores en su entierro
  12. ¿Hasta cuándo?
  13. La canción de los (buenos) borrachos
  14. Enemigos íntimos

CANCION ELEGIDA:
LLUEVE SOBRE MOJADO
Hay una lágrima en el fondo del río
de los desesperados,
Adán y Eva no se adaptan al frío
llueve sobre mojado.
Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
ya no sabe a pecado,
bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
llueve sobre mojado.
Al asesino de la cola del cine
El Padrino Dos le ha decepcionado,
Los violadores huyen de los jardines,
Llueve sobre mojado.
Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
sueños equivocados,
Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
llueve sobre mojado.
Y, después de llover,
Un relámpago va
deshaciendo la oscuridad
con besos, que antes de nacer,
morirán.
Ayer Julieta denunciaba a Romeo,
Por malos tratos, en el juzgado,
cuando se acuestan la razón y el deseo
llueve sobre mojado.
Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
cosas de enamorados,
bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
llueve sobre mojado.
La última guerra fue con mando a distancia,
el dormitorio era un vagón de soldados
por más que llueva y valga la redundancia,
llueve sobre mojado.
Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
uno y uno son demasiados,
bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
llueve sobre mojado.
Y, al final, sale un sol
incapaz de curar
las heridas de la ciudad,
Y se acostumbra el corazón
a olvidar.
Dormir contigo es estar solo dos veces,
es la soledad al cuadrado,
todos los sábados son martes y trece,
todo el año llueve sobre mojado.
Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
cada cual por su lado,
bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla,
llueve sobre mojado
Y... colorín colorado,
este cuento se ha terminado.


COMENTARIO: Hay una sola frase en esta canción, que es suficiente para que sea mi preferida del disco. Una sola frase que envidio, que me hubiera gustado escribir, que robaría una y mil veces sin ningún tipo de culpa: “Dormir contigo es estar solo dos veces, es la soledad al cuadrado”. Cómo se puede explicar con tan pocas palabras, lo que uno siente cuando quiere mucho más de lo que es querido? Cómo se puede ser tan claro, en una frase tan corta, y transmitir la profunda soledad que causa amar en forma desmedida a alguien que solamente se divierte con nosotros? Acaso Joaquín estaba a mi lado cada vez que yo sentía ese agujero en el alma? Porque dormir con alguien que no nos ama, es mucho peor que dormir solo. Mirar hacia el costado y ver un cuerpo para el que sólo somos un cuerpo, es tremendamente doloroso. Y escuchar los sonidos de un corazón que no late por nosotros, es como escuchar el tic-tac de una bomba, que uno sabe que a la mañana siguiente estallará… Justo en el momento en el que él se despierte, se levante, nos de un beso frío en los labios y se marche, sin gritarnos que nos ama.

viernes, 20 de febrero de 2009

YO, MI ME, CONTIGO

  1. El rocanrol de los idiotas
  2. Contigo
  3. Jugar por jugar
  4. Es mentira
  5. Mi primo El Nano
  6. Aves de paso
  7. El capitán de su calle
  8. Postal de La Habana
  9. Y sin embargo
  10. Viridiana
  11. Seis de la mañana
  12. No sopor…, no sopor…
  13. Tan joven y tan viejo

CANCION ELEGIDA:
AVES DE PASO
A las peligrosas rubias de bote
que en relicario de sus escotes
perfumaron mi juventud.
Al milagro de los besos robados
que en el diccionario de mis pecados
guardaron su pétalo azul.
A la impúdica niñera madura
que en el mapamundi de su cintura
al niño que fui espabiló.
A la flor de lis de las peluqueras
que me trajo el tren de la primavera
y el tren
del invierno me arrebató.
A las flores de un día
que no duraban,
que no dolían,
que te besaban,
que se perdían.
Damas de noche
que en asiento de atrás de un coche
no preguntaban
si las querías.
Aves de paso,
como pañuelos cura-fracasos.
A la misteriosa viuda de luto
que sudó conmigo un minuto
tres pisos en ascensor.
A la intrépida “cholula” argentina
que en el corazón con tinta china
me tatuó “peor para el sol”.
A las casquivanas novias de nadie
que coleccionaban canas al aire
burlón de la “nit de Sant Joan”.
A la reina de los bares del puerto
que una noche después de un concierto
me abrió
su almacén de besos con sal.
A las flores de un día
que no duraban,
que no dolían,
que te besaban,
que se perdían.
Damas de noche
que en asiento de atrás de un coche
no preguntaban
si las querías.
Aves de paso,
como pañuelos cura-fracasos.
A Justine, a Marylin, a Jimena,
a la Mata-Hari, a la Magdalena,
a Fátima y a Salomé.
A los ojos verdes como aceitunas
que robaban la luz de la luna de miel
de un cuarto de hotel, dulce hotel.
A las flores de un día
que no duraban,
que no dolían,
que te besaban,
que se perdían.
Damas de noche
que en el asiento de atrás de un coche
no preguntaban
si las querías.
Aves de paso,
como pañuelos cura-fracasos.


COMENTARIO: Hermoso y digno homenaje que Joaquín les hace a las mujeres que pasaron por su vida. La primera vez que la escuche, pensé: gracias, Sabina. Gracias por no cantarle a los amores eternos, a los que se quedan para siempre, a los que perduran en el tiempo. Estamos llenos de canciones, novelas, libros y poemas que nos hablan de ellos. Gracias por reivindicar a los amores que duran lo que tienen que durar: apenas un instante, una noche, una semana. Todos fuimos alguna vez aves de paso en la vida de alguien. Y nuestra propia historia, seguramente, estará plagada de otros tantos. Hombres y mujeres con los que no nos casamos ni tenemos hijos. Hombres y mujeres con los que apenas si nos enroscamos unas horas sin jurarnos nada. Y lo mejor de estas damas de las que nos habla Joaquín, es que ellas tampoco le preguntaban a él si las quería. Uno puede imaginarse a Joaquín amando hasta la eternidad a cada una de las chicas que nos nombra. Una eternidad que durará lo que un suspiro, pero que él inmortalizará en esta canción. Qué sentirán aquellas que son mencionadas en este tema? Dónde vivirá hoy, la intrépida cholula argentina? Dónde estará la reina de los bares del puerto? Qué dirán Justine, Marylin, Jimena, Fátima y Salomé a sus actuales maridos, cuando esta canción suena en las radios? Se encerrarán todas ellas a llorar por aquello que no fue, o brindarán en silencio, en honor a Joaquín? Bendito Joaquín, que sabe hacer poesía de aquello que la mayoría de los poetas discriminan. Una canción dedicada a las que alguna vez fuimos “aves de paso”… y a mucha honra.

jueves, 19 de febrero de 2009

ESTA BOCA ES MIA

  1. Esta noche contigo
  2. Por el bulevar de los sueños rotos
  3. Incluso en estos tiempos
  4. Siete crisantemos
  5. Besos con sal
  6. Ruido
  7. El blues de lo que pasa en mi escalera
  8. Como un explorador
  9. Mujeres fatal
  10. Ganas de…
  11. La casa por la ventana
  12. Más de cien mentiras
  13. Esta boca es mía

CANCION ELEGIDA:
MAS DE CIEN MENTIRAS
Tenemos memoria, tenemos amigos,
tenemos los trenes, la risa, los bares,
tenemos la duda y la fe, sumo y sigo,
tenemos moteles, garitos, alteres.
Tenemos urgencias, amores que matan,
tenemos silencio, tabaco, razones,
tenemos Venecia, tenemos Manhattan,
tenemos cenizas de revoluciones.
Tenemos zapatos, orgullo, presente,
tenemos costumbres, pudores, jadeos,
tenemos la boca, tenemos los dientes,
saliva, cinismo, locura, deseo.
Tenemos el sexo y el rock y la droga,
los pies en el barrio, y el grito en el cielo,
tenemos Quintero, León y Quiroga,
y un bisnes pendiente con Pedro Botero.
Más de cien palabras, más de cien motivos
para no cortarse de un tajo las venas,
más de cien pupilas donde vernos vivos,
más de cien mentiras que valen la pena.
Tenemos un as escondido en la manga,
tenemos nostalgia, piedad, insolencia,
monjas de Fellini, curas de Berlanga,
veneno, resaca, perfume, violencia.
Tenemos un techo con libros y besos,
tenemos el morbo, los celos, la sangre,
tenemos la niebla metida en los huesos,
tenemos el lujo de no tener hambre.
Tenemos talones de Aquiles sin fondos,
ropa de domingo, ninguna bandera,
nubes de verano, guerras de Macondo,
setas en noviembre, fiebre de primavera.
Glorietas, revistas, zaguanes, pistolas,
que importa, lo siento, hastasiempre, te quiero,
hinchas del atleti, gángsters de Coppola,
verónica y cuarto de Curro Romero.
Tenemos el mal de la melancolía,
la sed y la rabia, el ruido y las nueces,
tenemos el agua y, dos veces al día,
el santo milagro del pan y los peces.
Tenemos lolitas, tenemos donjuanes;
Lennon y McCartney, Gardel y LePera;
tenemos horóscopos, Biblias, Coranes,
ramblas en la luna, vírgenes de cera.
Tenemos naufragios soñados en playas
de islotes son nombre ni ley ni rutina,
tenemos heridas, tenemos medallas,
laureles de gloria, coronas de espinas.
Tenemos caprichos, muñecas hinchables,
ángeles caídos, barquitos de vela,
pobre exquisitos, ricos miserables,
ratoncitos Pérez, dolores de muelas.
Tenemos proyectos que se marchitaron,
crímenes perfectos que no cometimos,
retratos de novias que nos olvidaron,
y un alma en oferta que nunca vendimos.
Tenemos poetas, colgados, canallas,
Quijotes y Sanchos, Babel y Sodoma,
abuelos que siempre ganaban batallas,
caminos que nunca llevaban a Roma.


COMENTARIO: La primera vez que tomé contacto con esta canción, yo era algunos años más joven y estaba bastante más deprimida. Recuerdo que era una tarde aburrida, estaba en la oficina en la que trabajaba, extrañando horrores a alguien que nunca me extrañaba. Me sentía realmente triste. No le encontraba sentido a nada de lo que me rodeaba, estaba como vacía, anestesiada. Hasta que abrí mis mails y me encontré con un fragmento de esta letra que no conocía. Me la había enviado un amigo. Empecé a leerla y comprendí de inmediato el mensaje: tenía tantas cosas para seguir adelante, tantos motivos, tantas razones. Y a partir de allí, mentalmente, comencé a escribir mi propio listado. Y me di cuenta de que así como Joaquín nos gritaba que tenemos memoria, tenemos amigos, tenemos los trenes, la risa, los bares, yo también podía escribir mi propia canción. A partir de ese momento, cada vez que alguno de mis amigos está triste, yo uso esta canción para tratar de hacerle ver la cantidad infinita de razones que tiene. Una vez más, gracias, Joaquín.

miércoles, 18 de febrero de 2009

FISICA Y QUIMICA

  1. Y nos dieron las diez
  2. Conductores suicidas
  3. Yo quiero ser una chica Almodóvar
  4. A la orilla de la chimenea
  5. Todos menos tu
  6. La del pirata cojo
  7. La canción de las noches perdidas
  8. Los cuentos que yo cuento
  9. Peor para el sol
  10. Amor se llama el juego
  11. Pastillas para no soñar
  12. Y nos dieron las diez (bonus track)

CANCION ELEGIDA:
Y NOS DIERON LAS DIEZ
Fue en un pueblo con mar
una noche después de un concierto;
tú reinabas detrás
de la barra del único bar que vimos abierto
“Cántame una canción
al oído y te pongo un cubata”-
“Con una condición:
que me dejes abierto el balcón de tus ojos de gata”.
Loco por conocer
los secretos de tu dormitorio
esa noche canté
al piano del amanecer todo mi repertorio.
Los clientes del bar
uno a uno se fueron marchando,
tú saliste a cerrar,
yo me dije:
“Cuidado, chaval, te estás enamorando”,
luego todo pasó
de repente, tu dedo en mi espalda
dibujo un corazón
y mi mano te correspondió debajo de tu falda;
caminito al hostal
nos besamos en cada farola,
era un pueblo con mar,
yo quería dormir contigo y tú no querías dormir sola…
Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una
y las dos y las tres
y desnudos al amanecer nos encontró la luna.
Nos dijimos adiós,
ojalá que volvamos a vernos.
El verano acabó,
el otoño duró lo que tarda en llegar el invierno,
y a tu pueblo el azar
otra vez el verano siguiente
me llevó, y al final
del concierto me puse a buscar tu cara entre la gente.
Y no hallé quien de ti me dijera
ni media palabra,
parecía como si
me quisiera gastar el destino una broma macabra.
No había nadie detrás
de la barra del otro verano.
Y en lugar de tu bar
me encontré una sucursal del Banco Hispano Americano,
tu memoria vengué
a pedradas contra los cristales,
“Sé que no lo soñé”
protestaba mientras me esposaban los municipales.
En mi declaración
alegué que llevaba tres copas
y empecé esta canción
en el cuarto donde aquella vez te quitaba la ropa.
Y nos dieron las diez y las once, las doce y la una
y las dos y las tres
y desnudos al amanecer nos encontró la luna.

COMENTARIO: Otra de las historias que Joaquín nos cuenta en forma de canción y de la que nos morimos de ganas por saber si realmente sucedió o no. Joaquín relata paso a paso, minuto a minuto, la crónica de este amor que empezó en un pueblo con mar, una noche, después de un concierto. Y a medida que la canción suena, nos podemos ir imaginando la barra, el dormitorio, el piano. Una historia repetida mil veces, coreada en todos los bares en las que suena, y unas ganas locas de que alguna vez nos den las diez, las once, las doce y la una, y el tiempo pase sin darnos cuenta, y nos sorprenda el amanecer abrazando algo más que un hermoso recuerdo.

martes, 17 de febrero de 2009

MENTIRAS PIADOSAS

  1. Eclipse de mar
  2. Pobre Cristina
  3. Y si amanece por fin
  4. El muro de Berlín
  5. Mentiras piadosas
  6. Con un par
  7. Corre, dijo la tortuga
  8. Con la frente marchita
  9. Ataque de tos
  10. Medias negras
  11. Ponme un trago más
  12. A ti que te lo haces

CANCION ELEGIDA:
ECLIPSE DE MAR
Hoy dice el periódico que ha muerto una mujer que conocí
que ha perdido en su campo el Atleti
y que ha amanecido nevando en París.
Que han pillado un alijo de coca,
que a Piscis y Acuarios les toca el vinagre y la hiel.
Que aprobó el Parlamento Europeo una ley a favor de abolir el deseo
que falló la vacuna anti SIDA,
que un golpe de ha triunfado en la luna y movidas así.
Pero nada decía la prensa de hoy de esta sucia pasión, de este lunes marrón
del obsceno sabor a cubata de ron de tu piel,
del olor a colonia barata del amanecer.
Hoy amor, como siempre
el diario no hablaba de ti, ni de mí.
Hoy amor, igual que ayer, como siempre
el diario no hablaba de ti, ni de mí.
Hoy dijo la radio que han hallado muerto al niño que yo fui
que han pagado un pasote de pelas por una acuarela falsa de Dalí.
Que ha caído la bolsa en el cielo,
que siguen las putas en huelga de celo en Moscú.
Que subió la marea, que fusilan mañana a Jesús de Judea,
que creció el agujero de ozono,
que el hombre de hoy es el padre del mono del año 2000.
Pero nada decía el programa de hoy de este eclipse de mar,
de este salto mortal,
de tu voz tiritando en la cinta del contestador,
de la manchas que deja el olvido a través del colchón.


COMENTARIO: Una canción que a mí me llega profundamente. Quizás porque cuando uno está enamorado, tiene ganas de gritarlo a los cuatro vientos. Quizás porque cuando uno está enamorado, no pude creer que el resto del mundo no lo sepa. Los diarios y la radio hablan permanentemente de noticias que se suponen importantes, pero para quien ama, no hay nada más importante que lo que está sintiendo. No hay nada más importante que esa cara, ese cuerpo y esa voz que nos roba el sueño. Joaquín comparte conmigo esa especie de “desilusión” al comprobar que el diario no hablaba de él, ni de ella, ni de la historia de ese amor. Otra vez, el dolor por la ausencia se hace carne, y Sabina no puede creer que las noticias no hablen del salto mortal que significa estar perdidamente enamorado.

lunes, 16 de febrero de 2009

EL HOMBRE DEL TRAJE GRIS

  1. Eva tomando el sol
  2. Besos en la frente
  3. ¿Quién me ha robado el mes de abril?
  4. Una de romanos
  5. Juegos de azar
  6. Locos de atar
  7. Nacidos para perder
  8. Peligro de incendio
  9. ¡Al ladrón, al ladrón!
  10. Cuando aprieta el frío
  11. Los perros del amanecer
  12. Rap del optimista

CANCION ELEGIDA:
¿QUIEN ME HA ROBADO EL MES DE ABRIL?
En la posada del fracaso,
donde no hay consuelo ni ascensor,
el desamparo y la humedad
comparten colchón
y cuando, por la calle,
pasa la vida, como un huracán,
el hombre del traje gris
saca un sucio calendario del
bolsillo y grita
¿quién me ha robado el mes de abril?
¿Pero cómo pudo sucederme a mí?
¿Quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón.
La chica de BUP casi todas
las asignaturas suspendió
el curso en que preñada
aquel chaval la dejó y cuando en la pizarra
pasa lista en profe de latín
lágrimas de desamor
ruedan por la página de un bloc
y en él escribe
¿quién me ha robado el mes de abril?
¿Cómo pudo sucederme a mí?
¿Pero quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón.
El marido de mi madre
que en el último tren se largó
con una peluquera
veinte años menor
y cuando exhiben esas risas
de Instamatic en París,
derrotada en el sillón,
se marchita viendo Falcon Crest
mi vieja y piensa
¿quién me ha robado el mes de abril?
¿Cómo pudo sucederme a mí?
¿Pero quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón.


COMENTARIO: Otra de las canciones que derrocha melancolía… Cuánta tristeza hay en esta letra… Joaquín pregunta a gritos quién le ha robado su mes de abril, como si él no hubiera podido vivirlo, respirarlo, disfrutarlo. Y nos cuenta que hay otros que sienten de la misma manera y que se preguntan cómo les pudo haber pasado a ellos. Esta canción relata varias mini historias, plagadas de tristezas, de nostalgia, de dolor. Eso es lo que sabe hacer Joaquín a la perfección: más que ponerse en nuestro lugar, logra ponernos en su lugar. Y no hay quien, después de escuchar esta bella canción, no tenga ganas de salir a la calle y darle un buen golpe a quien sea que le haya robado ese maldito mes al pobre Sabina!

domingo, 15 de febrero de 2009

HOTEL, DULCE HOTEL

  1. Así estoy yo son ti
  2. Pacto entre caballeros
  3. Que se llama Soledad
  4. Besos de Judas
  5. Oiga, doctor
  6. Amores eternos
  7. Mónica
  8. Cuernos
  9. Hotel, dulce hotel

CANCION ELEGIDA:
PACTO ENTRE CABALLEROS
No pasaba de los veinte
el mayor de los tres chicos
que vinieron a atracarme el mes pasado.
“Subvenciónanos un pico
y no te hagas el valiente
que me pongo muy nervioso si me enfado.”
Me pillaron diez quinientas
y un peluco marca Omega
con un pincho de cocina en la garganta,
pero el bizco se dio cuenta
y me dijo -”oye, colega,
te pareces al Sabina, ese que canta.”
Era una noche cualquiera,
puede ser que fuera trece,
¿qué más da? pudiera ser que fuera martes.
Sólo se que algunas veces
cuando menos te lo esperas
el diablo va y se pone de tu parte.
-”Este encuentro hay que mojarlo
con jarabe de litrona,
compañeros antes de que cante el gallo”-
-”Tranquilo, tronco, perdona,
y un trago pa celebrarlo”-
los tres iban hasta el culo de caballo.
A una barra americana
me llevaron por la cara,
no dejaron que pagara ni una ronda,
controlaban tres fulanas
pero a mí me reservaban
los encantos de “Maruja la cachonda”.
Nos pusimos como motos,
con la birra y los canutos
se cortaron de meterse algo más fuerte;
nos hicimos unas fotos
de cabina en tres minutos,
parecemos la cuadrilla de la muerte.
Protegidos por la luna
cogieron prestado un coche,
me dejaron en mi queli y se borraron
por las venas de la noche
-”Enróllate y haznos una
copla guapa de la tuyas”- me gritaron.
Me devolvieron intacto,
con un guiño mi dinero,
la cadena, la cartera y el reloj;
yo, que siempre cumplo un pacto
cuando es entre caballeros,
les tenía que escribir esta canción.
Hoy venía en el diario
el careto del más alto,
no lo había vuelto a ver desde aquel día;
escapaba del asalto
al chalé de un millonario
y en la puerta le esperó la policía.
Mucha, mucha policía…


COMENTARIO: Traten de encontrar poesía en un intento de robo… Verán que es prácticamente imposible. Sin embargo, Joaquín lo consigue. Logra contarnos la historia de un asalto frustrado con gracia, picardía y poesía. En varias entrevistas se lo preguntaron y él nunca dejó claro si la canción refleja un hecho real. A Joaquín le gusta caminar ese fino límite entre la verdad y la mentira y solamente dice que algo de lo que cuenta “Pacto entre caballeros” en verdad pasó, sin aclarar mucho más. Los fanáticos de Sabina tampoco lo necesitamos. Encontrar la verdad absoluta sería desafiar las leyes implícitas que llevan sus canciones. Lo que cuenta Joaquín hay que creerlo, o no, pero nunca cuestionarlo. Esta es una de las canciones con las que el público más se agita en los bares. Su estribillo es coreado a viva voz en cada uno de los recitales que él ofrece o cuando las bandas tributo lo versionan. El “mucha mucha policía” se repite incansablemente, hasta dejar a más de un fanático absolutamente disfónico. Una vez más, los malos pasan a ser buenos y aquello que podía ser una tragedia, se convierte en algo de lo que Joaquín se ríe. De todos modos, uno supone que a él le cuesta mucho menos cumplir un pacto hecho con aquellos presuntos ladrones que con la propia policía.

sábado, 14 de febrero de 2009

JOAQUIN SABINA Y VICEVERSA

  1. Ocupen su localidad
  2. Cuando era más joven
  3. Princesa
  4. Hay mujeres
  5. Zumo de neón
  6. El joven aprendiz de pintor
  7. Como decirte, como contarte
  8. Tratado de impaciencia Nº 11
  9. Que demasiao
  10. Juana la Loca
  11. Calle Melancolía
  12. Pongamos que hablo de Joaquín
  13. Caballo de cartón
  14. Cuervo ingenuo
  15. Güisqui sin soda
  16. Rebajas de enero
  17. Adiós, adiós
  18. Pisa el acelerador
  19. Pongamos que hablo de Madrid
  20. Eh, Sabina
  21. Despedida

CANCION ELEGIDA:
GÜISQUI SIN SODA
Sólo cumplo años los años bisiestos que acaban en dos,
gasto más que gano, vivo con lo puesto menos un botón,
no tengo costumbre de guardar la ropa si voy a nadar,
nunca le hago ascos a la última copa ni al próximo bar.
Vendí por amores y no por dinero mi alma a Belcebú
y de las dos majas de Goya prefiero la misma que tú.
¿Qué voy a hacerle yo,
si me gusta el güisqui sin soda,
el sexo sin boda,
las penas con pan?
¿Qué voy a hacerle yo,
si el amor me gusta sin celos,
la muerte sin duelo,
Eva con Adán?
Opino con sade que al deseo los frenos le sientan fatal,
nunca entiendo el móvil del crimen, a menos que sea pasional;
si estrené algún himen, si rompí algún plato en mi mocedad,
hoy, ya retirado, sólo robo y mato por necesidad.
Siempre que la muerte viene tras mi pista me escapo por pies,
hay que estar al loro si eres trapecista y saltas sin red.
¿Qué voy a hacerle yo,
si me gusta el güisqui sin soda,
el sexo sin boda,
las penas con pan?
¿Qué voy a hacerle yo,
si el amor me gusta sin celos,
la muerte sin duelo,
Eva con Adán?


COMENTARIO: Con esta canción, Joaquín nos dice que es como es. Que más allá de los gustos y de las preferencias de los demás, el tiene su propio gusto, su manera de ver las cosas, su forma de vivir la vida. Y nos describe alguna de sus elecciones, como el sexo sin boda, el amor sin celos, y la muerte sin duelo. Se manifiesta pasional, nunca criminal, y con cierta resignación, dice que no tiene nada que hacer; que él es quien es, y así va a quedarse. Amén.

viernes, 13 de febrero de 2009

JUEZ Y PARTE

  1. Whisky sin soda
  2. Cuando era más joven
  3. Ciudadano cero
  4. El joven aprendiz de pintor
  5. Rebajas de enero
  6. Kung-Fu
  7. Balada de Tolito
  8. Incompatibilidad de caracteres
  9. Princesa
  10. Quédate a dormir


CANCION ELEGIDA:
PRINCESA
Entre la cirrosis
y la sobredosis
andas siempre, muñeca.
Con tu sucia camisa
y, en lugar de sonrisa,
una especie de mueca.
¿Cómo no imaginarte,
cómo no recordarte
hace apenas dos años?
Cuando eras la princesa
de la boca de fresa,
cuando tenías aún esa forma
de hacerme daño.
Ahora es demasiado tarde, princesa.
Búscate otro perro que te ladre, princesa.
Maldito sea el gurú
que levantó entre tú
y yo un silencio oscuro,
del que ya sólo sales
para decirme, “vale,
déjame veinte duros”.
Ya no te tengo miedo
nena, pero no puedo
seguirte en tu viaje.
Cuántas veces hubiera dado la vida entera
porque tú me pidieras
llevarte el equipaje.
Ahora es demasiado tarde, princesa…
Tú que sembraste en todas
las islas de la moda
las flores de tu gracia,
¿cómo no ibas a verte
envuelta en una muerte
con asalto a farmacia?
¿Con qué ley condenarte
si somos juez y parte
todos de tus andanzas?
Sigue con tus movidas,
pero no pidas
que me pase la vida
pagándote fianzas.
Ahora es demasiado tarde, princesa.
Búscate otro perro que te ladre, princesa.

COMENTARIO: Uno de los himnos de Joaquín. En cualquier bar en el que suene “Princesa”, ya sea por el mismo Sabina o versionado por alguna de esas bandas que le hacen tributo, sólo basta con mirar alrededor para encontrarse con princesas tarareándola y perros que les ladran. Quizás sea demasiado tarde para esa chica, quizás sea demasiado temprano para Joaquín, pero hasta cuando él decide decirle adiós a su princesa, lo hace de un modo tan hermoso, que aunque no la conozcamos, sabemos que ella volvería a abrirle la puerta en cuanto él la golpeara… La princesa que Joaquín se vio obligado a abandonar, porque terminó convirtiéndose en su propia tortura. La chica-problema de la que Joaquín debe escapar, como quizás nosotros deberíamos hacer cada vez que nos encontremos con alguien que puede terminar envuelto en una muerte con asalto a farmacia.

jueves, 12 de febrero de 2009

RULETA RUSA

  1. Ocupen su localidad
  2. Telespañolito
  3. Caballo de cartón
  4. Guerra mundial
  5. Negra noche
  6. Eh, Sabina
  7. Juana la loca
  8. Ring, ring, ring
  9. Pisa el acelerador
  10. Por el túnel

CANCION ELEGIDA:
EH, SABINA
Como fumo demasiado
mi voz se empieza a quebrar,
sueno tan desafinado:
si-do-re-mi-fa-sol-la,
Vivo del cáncer a un paso
sin hacerles caso a
los que me dicen “eh, Sabina”
ten cuidado con la nicotina.
No me des vitaminas, no,
dame fuego y rock and roll.
Como bebo demasiado
y no me se controlar
del trabajo me han echado
por falta de seriedad.
Que me pongan otro vaso
no pienso hacer caso a
los que me dicen “eh, Sabina”
ten cuidado con el Paternina.
No más vino de quina, no,
dame tinto y rock and roll.
Como salgo demasiado
con chicas a vacilar
me he quedado tan delgado
como un papel de fumar.
Gozando las noches paso
sin hacerles caso a
los que me dicen “eh, Sabina”
ten cuidado con la Josefina.
Leche con aspirinas, no,
dame sexo y rock and roll.
Todos me dicen “eh, Sabina”
ten cuidado con la nicotina,
eh, eh, eh, Sabina,
ten cuidado con el paternida.
eh, eh, eh, Sabina,
ten cuidado con la Josefina.
Naranjas de la china, no,
dame sexo y rock and roll.

COMENTARIO: Una canción graciosa e inteligente, en la que todos los que algunas veces nos portamos mal, podemos vernos reflejados. Un canto al hartazgo de los consejos de los que “todo lo saben” y creen que nunca se equivocan. Una manera poética de gritarle al mundo: Déjenme de joder! Joaquín se burla de las recomendaciones, de los mandatos, de lo que se supone que está bien… No tiene más religión que la suya y no quiere más Dios que el propio. Y así se tropiece mil veces con la misma piedra, Joaquín les avisa a todos que no les va a hacer caso... Un “as en la manga” para exponer cuando alguien quiera meterse en nuestra vida. Una gran forma de pedirle a todo el mundo que nos dejen vivir en paz… Y a mi manera…

LA MANDRAGORA

  1. Marieta
  2. Un burdo rumor
  3. Pongamos que hablo de Madrid
  4. Pasándolo bien
  5. El cromosoma
  6. Un santo varón
  7. Mi ovejita lucera
  8. Villatripas
  9. La tormenta
  10. Adivina adivinanza
  11. Nos ocupamos del mar
  12. La hoguera

CANCION ELEGIDA:
PONGAMOS QUE HABLO DE MADRID
Allá donde se cruzan los caminos,
donde el mar no se puede concebir,
donde regresa siempre el fugitivo,
pongamos que hablo de Madrid.
Donde el deseo viaja en ascensores,
un agujero queda para mí,
que me dejo la vida en sus rincones,
pongamos que hablo de Madrid.
Las niñas ya no quieren ser princesas,
y a los niños les da por perseguir
el mar dentro de un vaso de ginebra,
pongamos que hablo de Madrid.
Los pájaros visitan al psiquiatra,
las estrellas se olvidan de salir,
la muerte viaja en ambulancias blancas,
pongamos que hablo de Madrid.
El sol es una estufa de butano,
la vida un metro a punto de partir,
hay una jeringuilla en el lavabo,
pongamos que hablo de Madrid.
Cuando la muerte venga a visitarme,
que me lleven al sur donde nací,
aquí no queda sitio para nadie,
pongamos que hablo de Madrid

COMENTARIO: Joaquín le habla a Madrid, como cualquier porteño le hablaría a Buenos Aires. La fascinación por ese lugar, se refleja en cada una de sus oraciones. Vaya donde vaya, gire por donde gire, se emborrache en los bares de los lugares más exóticos del mundo, Joaquín sabe que cuando la muerte venga a buscarlo, quiere estar en “su” casa… y su casa es Madrid, como para cualquiera de nosotros puede serlo el lugar que elegimos con el alma y no con la partida de nacimiento.

miércoles, 11 de febrero de 2009

MALAS COMPAÑIAS

  1. Calle Melancolía
  2. Que demasiao
  3. Carguen, apunten, fuego
  4. Gulliver
  5. Círculos viciosos
  6. Pongamos que hablo de Madrid
  7. Manual para héroes o canallas
  8. Bruja
  9. Mi amigo Satán
  10. Pasándolo bien

CANCION ELEGIDA:
CALLE MELANCOLIA
Como quien viaja a lomos de una yegua sombría
por la ciudad camino, no preguntéis a donde
busco acaso un encuentro que me ilumine el día
y no hallo más que puertas que niegan lo que esconden. Las
chimeneas vierten su vómito de humo
a un cielo cada vez más lejano y más alto
por las paredes ocres se desparrama el zumo
de una fruta de sangre crecida en el asfalto. Ya
el campo estará verde, debe ser primavera
cruza por mi mirada un tren interminable
el barrio donde habito no es ninguna pradera
desolado paisaje de antenas y de cables.
Vivo en el número 7 calle Melancolía
quiero mudarme hace años al barrio de la Alegría
pero siempre que lo intento ha salido ya el tranvía
en la escalera me siento a silbar mi melodía.
Como quien viaja a bordo de un barco enloquecido
que viene de la noche y va a ninguna parte
así mis pies descienden la cuesta del olvido
fatigados de tanto andar sin encontrarte. Luego
de vuelta a casa enciendo un cigarrillo
ordeno mis papales, resuelvo un crucigrama
me enfado con las sombras que pueblan los pasillos
y me abrazo a la ausencia que dejas en mi cama, Trepo
por tu recuerdo como una enredadera
que no encuentra ventanas donde agarrase. Soy
esa absurda epidemia que sufren las aceras
si quieres encontrarme ya sabes donde estoy.
(Estribillo)

COMENTARIO: Joaquín anuncia a los cuatro vientos, sin ninguna vergüenza y hasta con un dejo de orgullo, que vive en Calle Melancolía. Y quién no, sobre todo, si habitamos en Buenos Aires, la ciudad del tango y la nostalgia. Más de una vez me encontré recorriendo esa calle, con Joaquín a mi lado, diciéndome estos versos en el oído. Más de una vez abracé la ausencia que alguien dejó en mi cama y encendí un cigarrillo, y ordené mis papeles, y me fui a dormir con la secreta esperanza de despertar al otro día y encontrarme en otra calle, con otro nombre, con menos historia para olvidar y menos histeria para vivir. Esta calle está plagada de gente a la que le cuesta olvidar. Por eso, cuando se escucha esta canción, todos los que la recorremos habitualmente, con sólo mirarnos a los ojos, podemos reconocernos.

martes, 10 de febrero de 2009

INVENTARIO

  1. Inventario
  2. Tratado de impaciencia número 10
  3. Tango del quinielista
  4. 1968
  5. 40 Orsett Terrace
  6. Romance de la gentil dama y el rústico pastor
  7. Donde dijeron digo decid Diego
  8. Canción para las manos de un soldado
  9. Palabras como cuerpos
  10. Mi vecino de arriba

CANCION ELEGIDA:
INVENTARIO
Las cosas que me dices cuando callas
los pájaros que anidan en tus manos
el hueco de tu cuerpo entre las sábanas
el tiempo que pasamos insultándonos.
El miedo a la vejez y a los almanaques
lo taxis que corrían despavoridos
la dignidad perdida en cualquier parte
el violinista loco, los abrigos.
Las lunas que he besado yo en tus ojos
el denso olor a semen desbordado
la historia que se mofa de nosotros
las bragas que olvidaste en el armario.
El espacio que ocupas en mi alma
la muñeca salvada del incendio
la locura acechando agazapada.
La batalla diaria entre dos cuerpos
mi habitación con su cartel de toros
el llanto en las esquinas del olvido
las cenizas que quedan, los despojos
del hijo que jamás hemos tenido.
El tiempo del dolor, los agujeros
el gato que maullaba en el tejado
el pasado ladrando como un perro
el exilio, la dicha, los retratos.
La lluvia, el desamparo, los discursos
los papeles que nunca nos unieron
la redención que busco entre tus muslos
tu nombre en la cubierta del cuaderno.
Tu modo de abrigarme el corazón
la celda que ocupaste en una cárcel
mi barca a la deriva, mi canción
el bramido del viento entre los árboles.
El silencio que eximes como un muro
tantas cosas hermosas que se han muerto
el tiránico imperio del absurdo
los oscuros desvanes del deseo.
El padre que murió cuando eras niña
el beso que se pudre en nuestros labios
la cal de las paredes, la desidia
la playa que habitaban los gusanos.
El naufragio de tantas certidumbres
el derrumbe de dioses y de mitos
la oscuridad en torno como un túnel
la cama navegando en el vacío.
El desmoronamiento de la casa
el sexo rescatándonos del débil
el grito que horadó la madrugada
el amor como un rito en torno al juego.
El insomnio, la ausencia, las colillas
el arduo aprendizaje del respeto
las heridas que ya ni Dios nos quita
la mierda que arrastramos sin remedio.
Todo lo que nos dieron y quitaron
los años transcurridos tan deprisa
el pan que compartimos, las caricias
el peso que llevamos en las manos.

COMENTARIO:
Escuchar esta canción es sumergirse de lleno en la más profunda de las melancolías. Cada frase es un poema en sí mismo y Joaquín logra transmitir la gran nostalgia que dejan las ausencias. Un repaso de todas las cosas que se extrañan cuando “él” o “ella” deciden que no somos lo suficientemente buenos como para quedarse a nuestro lado para siempre. O cuando “él” o “ella” están, pero mucho menos de lo que nosotros quisiéramos que estén. El amor y el dolor, mezclados de un modo imposible de imitar, en un inventario que repasa paso a paso, lo que más queremos y lo que más odiamos. Es inevitable al escucharla, que cada uno haga su propio “inventario”. Eso es lo genial de Sabina… Logra llevarnos al sitio al que él quiere, casi sin proponérselo.

miércoles, 4 de febrero de 2009

RADIOGRAFIA DE UNA FANATICA

La primera vez que escuché a Sabina, tenía 19 años. Estaba cursando la carrera de publicidad y había ido a la casa de una compañera para terminar un trabajo práctico que nos habían pedido. La tarea resultaba bastante aburrida, por cierto, y lo que más recuerdo de aquella noche es que de fondo sonaba el CD de Joaquín, MENTIRAS PIADOSAS.
En una de las pausas que hicimos para tomar un café, empecé a prestarle atención a la letra de Y SI AMANECE POR FIN. En esa época, y aunque cueste creerlo porque yo ya era una chica muy moderna, todavía no había tenido relaciones sexuales. Muchos de ustedes (incluidos mis padres) pensarán que esta aclaración no hacía falta. Pero yo pienso que sí. Porque en aquel momento, en donde el sexo era algo por descubrir, que me despertaba curiosidad pero también, mucho temor y mucha culpa, yo pensé que si encontraba algún chico que me invitara a acostarme con él usando semejante poesía como argumento, iba a ser imposible resistirme… Supe que de inmediato diría que sí, si alguien me cantara:
Y si amanece por fin y el sol incendia el capó de los coches,
baja las persianas,
de ti depende, y de mí, que entre los dos siga siendo ayer noche,
hoy por la mañana.
Olvídate del reloj
nadie se ha muerto por ir sin dormir una vez al currelo
por qué comerse un marrón
cuando la vida se luce poniendo ante ti un caramelo.
Anda deja que te desabroche un botón,
que se come con piel la manzana prohibida,
y tal vez no tengamos más noches,
y tal vez no seas tú, y tal vez no seas tú,
la mujer de mi vida.
El tiempo es un microbús
que sólo cruza una vez esta breve y absurda comedia
y yo no soy Mickey Rourke
ni tú Kim Basinguer ni tengo nueve semanas y media.
La buena reputación
es conveniente dejarla caer a los pies de la cama
hoy tienes una ocasión
de demostrar que eres una mujer además de una dama.
Anda deja que te desabroche un botón,
que se come con piel la manzana prohibida,
y tal vez no tengamos más noches,
y tal vez no seas tú, y tal vez no seas tú,
la mujer de mi vida.

Esta es la letra de la canción que tanto me atrapó en aquel momento…
Por suerte o por desgracia, no encontré en Dimensión (la disco a la que yo iba habitualmente, que estaba en la Avenida Córdoba y que ya no existe) ningún chico que me hablara con tan hermosas palabras. Así que conservé mi preciada virginidad algunos años más y tuve mi primera vez con alguien que, tal cual lo predijo Sabina, no era Mickey Rourke, no fue el amor de mi vida y para el que yo tampoco fui la mujer de su vida.
Ese fue el inicio de mi fanatismo por Joaquín. Ese fue el inicio de este fanatismo por su música y, sobre todo, por sus letras.
En ese entonces sentí que Joaquín había llegado tarde a mis oídos. Sin embargo, hoy sé que llegó en el momento oportuno. A una edad en la que yo ya estaba lo suficientemente herida como para entender algunas de sus letras. Quizás escucharlo antes de ciertos desengaños, sea malgastarlo. Porque para que Joaquín cale profundo, hay que tener “un corazón podrido de latir”.
De inmediato me compré el disco. MENTIRAS PIADOSAS fue el primero que tuve mezclado con otros de Christian Castro, Aerosmith, AC/DC y Andrés Calamaro (Sí, leyeron “Christian Castro”… Como podrán observar, mi gusto musical era bastante variado). Y la canción que lleva ese nombre, también parecía hecha para mí.
Yo le quería decir la verdad por amarga que fuera
contarle que el universo era más ancho que sus caderas.
Le dibujaba un mundo real no uno color de rosa,
pero ella prefería escuchar mentiras piadosas.

En plena adolescencia, lo único que una chica quiere es que le mientan y que las mentiras resulten lo suficientemente creíbles. Con el correr de los años, uno empieza a comprender que es mucho mejor una verdad dolorosa, que “cien mentiras que valen la pena”.
El disco fue un maravilloso descubrimiento. No sólo las letras me gustaban sino que también me encantaba escuchar su música. Encontraba buenas metáforas, frases inteligentes y un ritmo pegadizo que hizo que se despertaran mis ganas de conocer más acerca de él.
Con mi modesto sueldo de empleada en un video club, fui a una disquería y compré todos los CD que en ese momento había de Joaquín. Eran varios, así que durante un buen tiempo me pasé las horas escuchándolo y descubriéndolo, como quien va pelando por capas una cebolla… (la metáfora vale, también, por las “lágrimas de plástico azul” que derramé con algunos de sus temas).
A medida que crecía cada vez lo entendía y lo disfrutaba más y más. De inmediato empecé a conectarme a Internet y esperar con ansias el lanzamiento de cada uno de sus discos para comprarlos el mismo día que salían a la venta. También comencé a prestar atención sus entrevistas, a leer sus reportajes y los libros que se habían escrito sobre él. Me encontré con un tipo más que interesante. Gracioso, inteligente, siempre encontraba algo que merecía ser escuchado.
Los años y los desengaños (que ahora que lo pienso, por algo se llaman desengAÑOS… Será que a medida que pasa el tiempo cada vez nos duelen más?) hicieron que algunas de sus letras se convirtieran en un himno para mí.
Yo era muy enamoradiza, sufría el “síndrome del hombre equivocado”, y Joaquín Sabina me venía como anillo al dedo. El es rey de la melancolía, el abanderado de los amores imposibles, el ícono de los fracasos amorosos… (quizás debería corregirme y en lugar de escribir “él es”, debería escribir “él nos vende que es”… porque digamos la verdad… Joaquín puede haber sufrido por amor, es cierto… pero vamos… es Joaquín Sabina!!! Cuántas chicas pueden haberle dicho que no???)
El tiempo fue pasando y su música me acompañó en distintas etapas. Como tuve mala suerte en el amor, aunque hoy creo y espero haberla dejado atrás, me sentía identificada con muchas de sus frases. Una de mis preferidas era: “no hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió”. Porque como ya dije, una adolescente, vive enamorada de imposibles… y a los imposibles se los imagina perfectos, porque para imperfecciones ya tenemos la realidad. Así que ahí andaba yo, sumergida en mi nostalgia, cargando las canciones de Sabina como una mochila.
El año 1999 me sorprendió con el lanzamiento de 19 DIAS Y 500 NOCHES. Apenas me compré el disco, me di cuenta que iba a ser uno de mis favoritos. El arte de tapa es maravilloso, con ese Joaquín vestido de ángel maldito, con sus alas negras abiertas de par en par. Hay varias canciones imperdibles en él… AHORA QUE…, 19 DIAS Y 500 NOCHES, BARBI SUPERESTAR, UNA CANCION PARA LA MAGDALENA, DIEGUITOS Y MAFALDAS, A MIS CUARENTA Y DIEZ, DONDE HABITA EL OLVIDO, NOS SOBRAN LOS MOTIVOS y NOCHES DE BODA son mis preferidas.
AHORA QUE…, porque me parece una bonita forma de decir: bueno, ya llegué, tengo un amor normal, estable, tranquilo… Y ahora qué hago con esto??? Cómo se usa??? Dónde lo pongo??? Su música tiene algo de melancolía, como si uno, que está acostumbrado a morir si el otro se va, sintiera algo de tristeza al encontrar un amor en el que “hay pan para hoy”….
Ahora que nos besamos tan despacio,
ahora que aprendo bailes de salón,
ahora que una pensión es un palacio,
donde nunca falta espacio
para más de un corazón…
Ahora que las floristas me saludan,
ahora que me doctoro en lencería,
ahora que te desnudo y me desnudas,
y, en la estación de las dudas,
muere un tren de cercanías…
Ahora que nos quedamos en la cama,
lunes, martes y fiestas de guardar,
ahora que no me acuerdo del pijama,
ni recorto el crucigrama,
ni me mato si te vas.

19 DIAS Y 500 NOCHES es una canción sorprendente… Altamente recomendable para iniciarse en el mundo “sabinesco”… Quienes la escuchen por primera vez se van a encontrar con una buena historia, excelentemente contada, juegos de palabras, metáforas envidiables, música pegadiza y estribillo inolvidable. A mi criterio, es una de las canciones mejor logradas de Joaquín. En principio, porque Sabina consigue poner en palabras lo que todos los que alguna vez nos vimos obligados a olvidar, hemos pasado… Porque cuando uno necesita imperiosamente arrancarse a alguien del corazón, lo más probables es que tarde más noches que días y que la proporción exacta sea de 19 contra 500. Así que desde el título, es una canción con la que me siento identificada. En segundo lugar, porque su primer estrofa ya es una estupenda metáfora: “Lo nuestro duró, lo que duran dos peces de hielo, en un güisqui on the rocks”. Y lo mejor de este tema, lo más ocurrente, lo más destacable, lo que siempre me causó gracia y admiración, es que tenemos un Joaquín que nos grita a los cuatro vientos que como ella se fue, vuelve a los bares, a las putas y a la cocaína… Así de tremendo… Pero Joaquín lo dice de una manera tan bella, que uno se conmueve y hasta se apiada de él…
Y regresé
a la maldición
del cajón sin su ropa,
a la perdición
de los bares de copas,
a las cenicientas
de saldo y esquina,
y, por esas ventas
del fino Laína,
pagando las cuentas
de gente sin alma
que pierde la calma
con la cocaína,
volviéndome loco,
derrochando
la bolsa y la vida
la fui, poco a poco,
dando por perdida.
A alguno de ustedes se le hubiera ocurrido describir a una prostituta como una “cenicienta de saldo y esquina”??? Seguramente no… Por eso nosotros no somos Sabina, y él sí.
Años después conocí a un chico por Internet. Nombre árabe, excelente persona, fanatismo absoluto por Sabina, podrían ser una buena definición. Escuchábamos mucho el disco DIMELO EN LA CALLE, que acababa de salir. Nos pasábamos horas analizando sus letras y discutiendo qué había querido decir Joaquín con alguna de sus frases. Era bastante interesante, pero hoy supongo que la interpretación que nosotros le dimos a muchas de ellas, seguramente no tenía nada que ver con lo que Sabina quiso transmitir… O sí, quién lo sabe?
También me acuerdo que nos pasamos un buen rato debatiendo sobre una frase que decía “la salsa de tomate de las heridas se corta con un chute de vanidad”. Creo que llegamos a una interpretación acertada, pero sería muy extensa para explicarla en este momento.
PECES DE CIUDAD era otra de las canciones que nos gustaba muchísimo…
Y desafiando el oleaje
sin timón ni timonel,
por mis sueños va, ligero de equipaje,
sobre un cascarón de nuez,
mi corazón de viaje,
luciendo los tatuajes
de un pasado bucanero,
de un velero al abordaje,
de un no te quiero querer.

Hoy pienso que mis tatuajes de un pasado bucanero y sus ganas de no quererme querer, hicieron de este tema casi nuestro himno… Y no puedo dejar de mencionar una frase tristemente cierta de esa canción.
En Comala comprendí
que al lugar donde has sido feliz
no debieras tratar de volver.
Joaquín nos tira en la cara una de esas verdades que son difíciles de digerir… No debemos intentar nunca volver a ese lugar donde fuimos felices (que pueden ser los brazos de aquel ex novio que jamás olvidamos), porque seguramente todo habrá cambiado y nada será lo mismo. Es mejor quedarse con un recuerdo digno y hermoso, a comprobar con nuestros propios ojos que aquello que antes nos pareció maravilloso, hoy ya no lo es tanto.
Otro de los discos que solíamos escuchar mucho era YO, MI, ME, CONTIGO, en el que hay varias canciones excelentes. Recuerdo en particular una vez que nos colgamos un buen rato a desmenuzar la letra del ROCANROLL DE LOS IDIOTAS.
Yo no tenía ganas de reír,
tú reías para no llorar;
yo le guiñaba un ojo a mi nariz,
tú consolabas a tu soledad.
Yo sin ninguna escoba que vender,
tú con mil y una noches que olvidar;
a mí no me quería una mujer,
a ti se te moría una ciudad.
Tú habías perdido el último autobús,
a mí me habían echado de otro bar;
los mismos alfileres de vudú,
el mismo cuento que termina mal.
Pero quiso el cielo
bautizar el suelo
con su gota a gota
y con champú de arena
para tu melena
de muñeca rota
y tu mirada azul
me dijo a cara o cruz
y mi alma de tahúr
lo puso a doble o nada.
Y los peces de colores de mis botas
y tus marchitos zapatitos de tacón
locos por naufragar
salieron a bailar
al ritmo de la lluvia sobre las capotas
el rocanrol de los idiotas.
Yo no venía de ningún país,
tú ibas camino de cualquier lugar;
conmigo no contaba el porvenir,
de ti no se acordaba el verbo “amar”.
Yo no jugaba para no perder,
tú hacías trampas para no ganar;
yo no rezaba para no creer,
tú no besabas para no soñar.
Y sin equívocos de vodevil
ni alertas rojas en el corazón
el dios de la tormenta quiso abrir
la caja de los truenos y tronó,
porque quiso el cielo
acariciar el suelo
con su gota a gota
y con champú de arena
para tu melena
de muñeca rota.
Qué disparate de
partida de ajedrez
con un partenaire
adicta al jaque mate.
Y tu bolso como un nido de gaviotas
y mi futuro con pan duro en el cajón
locos por naufragar
salieron a bailar
al ritmo de la lluvia sobre las capotas
el rocanrol de los idiotas.
Capeando el temporal
salieron a bailar
como dos locos bajo el chaparrón de notas
el rocanrol de los idiotas.
El rocanrol,
el rocanrol de los idiotas.
Como tu y como yo.
El rocanrol de los idiotas.
Se marcó la calle
con aquel detalle
de dejarnos solos.
El rocanrol de los idiotas.
Y por casualidad
comenzó a tocar
la flauta de Bartolo.
El rocanrol de los idiotas.
Go Johnny go, go, go.
El rocanrol de los idiotas.
All you need is love.
Y bailar
el rocanrol de los idiotas.
A vam ba baluba balam bam bu.
Tutti frutti.
El rocanrol de los idiotas.
Don’t worry.
El rocanrol de los idiotas.
El decía que coincidía exactamente con el tipo de relación que nosotros dos estábamos viviendo. Y a mí no me quedan dudas de que en aquel momento, yo era “una partenaire adicta al jaque mate”.
De ese disco, otra de las canciones que descubrí y que me pareció tristemente maravillosa, fue Y SIN EMBARGO.
De sobras sabes que eres la primera,
que no miento si juro que daría
por ti la vida entera,
por ti la vida entera;
y, sin embargo, un rato, cada día,
ya ves, te engañaría
con cualquiera,
te cambiaría por cualquiera.
Ni tan arrepentido ni encantado
de haberme conocido, lo confieso.
Tú que tanto has besado
tú que me has enseñado,
sabes mejor que yo que hasta los huesos
sólo calan los besos
que no has dado,
los labios del pecado.
Porque una casa sin ti es una emboscada,
el pasillo de un tren de madrugada,
un laberinto
sin luz ni vino tinto,
un velo de alquitrán en la mirada.
Y me envenenan los besos que voy dando
y, sin embargo, cuando
duermo sin ti contigo sueño,
y con todas si duermes a mi lado,
y si te vas me voy por los tejados
como un gato sin dueño
perdido en el pañuelo de amargura
que empaña sin mancharla tu hermosura.

No debería contarlo y, sin embargo,
cuando pido la llave de un hotel
y a media noche encargo
un buen champán francés
y cena con velitas para dos,
siempre es con otra, amor,
nunca contigo,
bien sabes lo que digo.
Porque una casa sin ti es una oficina,
un teléfono ardiendo en la cabina,
una palmera
en el museo de cera,
un éxodo de oscuras golondrinas.
Y cuando vuelves hay fiesta
en la cocina
y bailes sin orquesta
y ramos de rosas con espinas,
pero dos no es igual que uno más uno
y el lunes al café del desayuno
vuelve la guerra fría
y al cielo de tu boca el purgatorio
y al dormitorio
el pan de cada día.
Analizando las respuestas que más adelante leerán en el libro, podrán darse cuenta de que este tema es uno de los preferidos de los fanáticos de Sabina, de los dueños de los bares, de los webmasters de sus páginas y de las bandas que le hacen tributo. Por qué? Porque relata de una forma casi divertida, algo que en el fondo es en verdad muy doloroso. Ese permanente inconformismo que muchas veces hace que vivamos con uno pero soñemos con otro, y que cuando estamos con el que soñamos extrañemos al con el que vivimos (o algo así). Quizás en esta canción se defina un poco esa diferencia entre el amor y la pasión… El amor, que es el que nos hace sentir que “una casa sin ti es una oficina” y por otro lado, las ganas de seguirnos envenenando de culpa con otros besos. En esta canción Joaquín nos relata esa imposibilidad que tiene él (y varios más, por cierto) de mantener la fidelidad en la pareja, quizás por eso es una de las preferidas del público que lo escucha. Uno quisiera enojarse con ese Joaquín que, con fino cinismo, hace prácticamente un culto al engaño, a la trampa… pero resulta imposible condenarlo, sobre todo porque todos somos “juez y parte”. Porque más allá de si en nuestra naturaleza está ser infiel o no, todos podemos entender perfectamente de qué nos está hablando y de inmediato produce un tremendo efecto de identificación, principalmente en su estribillo que se corea a viva voz: “Y me envenenan los besos que voy dando y, sin embargo, cuando duermo sin ti contigo sueño, y con todas si duermes a mi lado”.
También con mi amigovio (que antigüedad!!!) árabe, fui a ver mi primer tributo a Joaquín, en el Down Town Matías… Me acuerdo del entusiasmo de la gente, de la onda “sabinesca” que se respiraba en el lugar, de la alegría con la que se coreaban los estribillos más pegadizos y sobre todo, de la euforia que yo sentí al escuchar en vivo, algo que al menos se asemejaba un poquito a escucharlo a Sabina… Unos meses más tarde el chico de Internet desapareció de mi vida, pero yo me quedé con Joaquín.
No sólo su música me acompañó desde los 19 años, si no que tiempo después, descubrí sus sonetos y también disfruté mucho al leerlos. Siempre me gustó escribir… Cuando era muy chica, escribía canciones cambiándole la letra a las canciones de los músicos que sonaban en ese momento (César Banana Pueyrredón, Alejandro Lerner, Valeria Lynch… Sí, definitivamente esta parte del libro podría llamarse “Honestidad brutal”). Así que leer sus poesías fue abrir una puerta a otro universo. Más o menos para el año 1999 empecé a escribir mis primeros cuentos y a perfeccionarme en la poesía… Joaquín también me sirvió de inspiración. Leer sus letras como si fueran poemas y analizar sus sonetos, me sirvieron para mejorar mi modo de escribir… (o al menos, eso es lo que yo creo!)

martes, 3 de febrero de 2009

“NO, A MI NO ME GUSTA SABINA”

Muchas veces me pregunté cómo era posible que hubiera gente a la que no le gustara Sabina. Sinceramente, no podía comprenderlo. Cómo alguien, en medio de una charla, podía dispararme directo al corazón con un: “No, a mí no me gusta Sabina”.

Esa afirmación me quedaba dando vueltas y vueltas en la cabeza. Tenía dos opciones: o quien la decía era poseedor de un alma insensible, incapaz de conmoverse con los versos de uno de los mejores poetas que yo haya conocido, o quien cometía semejante herejía nunca había “escuchado” a Sabina y simplemente había “oído” alguna de sus canciones en la radio, sin prestarle la debida atención. Reconozco que soy bastante intransigente en este tema y no evalué la posibilidad de que alguien pudiera escucharlo y directamente, no disfrutarlo.

Por eso, y porque soy terca, porfiada y caprichosa, decidí escribir este libro. Un libro con el que pretendo cambiar la opinión de todos aquellos que se animan a desafiarme con la maldita frase. Y con el que además, espero colaborar con todos los que sí se consideran fanáticos…

En estas páginas se encuentran las letras de las canciones que, a mi entender, son las más bellas e interesantes de cada uno de los discos de Joaquín. Intento torcer el veredicto de quienes dicen no disfrutar de su música, como así también, introducir a quienes nunca lo escucharon e inyectarles el “bichito de la duda”.

Soy una fanática de sus letras y de su música. No soy una gruppie, no lo sigo a cada uno de sus recitales, no tengo su póster en mi habitación y jamás luché por conseguir su autógrafo. Sí tengo todos sus discos y una colección de canciones que acompañaron mi vida. Sí tengo miles de frases atesoradas que me hubiera encantado haber escrito, pero a Joaquín se le ocurrieron antes. Y sí tengo muchas ganas de abrir una puerta para que puedan colarse los seguidores, los no tanto, los que lo conocen, los que no, para que todos puedan espiar el impresionante mundo de Joaquín.
Señoras y señores, con ustedes, el gran poeta urbano, el extraordinario “contador de historias”, el rey de los excesos: Joaquín Sabina.